- El Contraemprendedor
- Posts
- Un sector amable
Un sector amable
¿Cuándo se defenestrará?
Estar en este sector es escuchar historias de terror constantemente, como habéis podido comprobar, y a la misma vez, disfrutar de una amabilidad que podría hacer sospechar hasta al más desconfiado.
Desde que empecé en esto, en 2021, no he parado de recibir ayuda desde dentro del ecosistema.
Searchers que te presentan a sus inversores.
Otros que te cuentan los pros y los contras de esta modalidad.
Inversores que responden correos en menos de un día, otros que charlan contigo aunque no estés levantando pasta.
Gente que te pasa su PPM para que lo fusiles.
Otros te dan su checklist para auditorías.
Y casi sin conocerte, y sin dudarlo.
Y lo mejor: nadie pide nada a cambio.
Parece mentira, pero es real.
Yo lo he vivido en primera persona.
Yo sí, tú no, amiguete.
Y en esas me encuentro.
El jueves pasado cayó en mis manos una posible adquisición y, casi sin dudarlo, me dije…
“Esto lo he visto yo antes.”
Y así era.
Conocí a dos searchers hace tiempo.
Estaban con su búsqueda y me contactaron para hablar del sector del reciclado, ya que en ese momento yo estaba a punto de comprar una empresa de ese sector.
Charlamos. Compartimos info. Enlaces. Todo.
Al tiempo, seguimos en contacto.
Y ellos me enseñaron un info memo bastante bueno —estos dos cabrones son bastante finos, ya me gustaría a mí hilar tan bien— de una compañía bastante buena para la que estaban levantando pasta.
Yo les di lo único que tengo valioso:
una lista con 300 inversores del sector.
¿Y sabes qué ha pasado?
Que al final ni pudieron (ni quisieron) completar ese deal.
Y oh, cosas del destino… ha acabado en mi buzón de correo.
¿Y sabes qué hicieron estos tipos el mismo jueves?
Responder mis WhatsApps en menos de cinco minutos.
Luego me llamaron por la tarde.
El sábado leyeron mis mensajes.
Y el lunes, a las 10:00, me dieron una reunión de una hora.
Una hora. En pleno julio. Y de un día para otro.
Si me enamoró comprar una empresa en vez de empezar desde cero,
más me enamora este tipo de actitudes.
Lo humano por encima de lo divino.
Es un concepto que se ve poco en los negocios.
Historias buenas y malas te van a pasar.
No es emprendimiento.
Es estar vivo intentando cosas difíciles.
Esas te las cuento aquí.
Pero vivirlas es otro nivel.
A ver cómo avanza esta oportunidad de compra, que espero que sea la mía.
Además, es un número entre 11 y 19 kilos…
Aquí ya te empiezan a temblar las canillas.
Pero es fabricación, a un solo turno, lista para salir a la calle a vender como locos.
Estas son las empresas que más me gustan, porque me veo dentro pudiendo ayudar de verdad y encima se meten 2 kilos limpios al año en la buchaca, con eso, creces, pagas deuda y te preparas para el futuro.
Hasta mañana.
Recuerda:
Te llevas 100.000 lerus si me presentas a un empresario zorro plateado que tenga un empresón:
Ventas 6 kilos/año, euros directos al taco, dos kilos/año limpio de polvo y paja, desde hace tres años. Que la relación ventas - neto sea de un tercio.
Que el dueño esté forrao a romper… recuerda, yo quiero ser ese también.
Una empresa sin sucesores y dueño en jubilación.
Que tenga muchos clientes, no quiero el clásico que depende de uno grande.
Te llevas 100.000 lerus solo si compro esa empresa, si no, te mando un abrazo en video, te lo prometo. Porque puede, que al final no compre un empresón, nunca se sabe lo que puede pasar en la vida.
Una empresita es lo mismo pero 10 veces más pequeña, si te quedas por aquí, te enseño a comprar o vender la tuya, y también a buscar el dinero, y a decidir abogados, y en fin a todo, pero quédate y pásale estos a inversores, por si se quieren enterar que esto es más rentable que las startups esas molonas con futbolines y gente dándolo todo de culo a culo.