Syndicate pie

Cuando vayas a comprar una empresa con el dinero de otros, y ya que vas a hacerlo por primera vez, está bien hacer una lista de los Reyes Magos.

Yo la hice.
Yo sí, tú no, amiguete.

Hay varias áreas en las que vas a necesitar ayuda.
En teoría.
Ya veremos en la práctica.

Pero antes, vamos área por área:

Buscar.
Es cojonudo que esa persona haya buscado empresas antes.
No necesariamente como searcher.
Quizás en un fondo o en algo parecido.

Así puede sugerirte potenciales vendedores.
O darte consejos prácticos para la búsqueda.

Due Diligence.
Recuerdo que cuando era pequeño y perdía algo, evitaba que mi viejo se enterara.
Se ponía a remover cada rincón de la casa.
Incluso la basura.
Cosas absurdas.

Aunque ya hubiéramos encontrado lo que buscábamos.

Pues eso es una due diligence: saberlo todo de la empresa.

Si entre tus inversores hay exabogados, auditores o financieros, mejor que mejor.
Tendrás contactos con proveedores de servicios que complementen sus consejos.

La adquisición.
Aquí, tranquilo.
Es solo negociar como si te fuera la vida en ello.

Los documentos jodidos de verdad los hacen los abogados y asesores.
Notarías y toda la pesca.

Aquí necesitas un perro viejo.
Un zorro lomo plateado.
De esos que se ahúman el güisqui con roble americano… y sin hielo.

Gestionar la empresa.
Aunque ese marrón te lo comes tú solito, es cojonudo tener a alguien que ya haya escalado una empresa hasta doblar ventas en 5 años.

A ese jambo lo necesitas.
Al menos, para poder llorar juntos en la sobremesa tras un chuletón y una botella de Rioja.

Y escuchar cómo ha solventado todos y cada uno de los marrones de una PYME.
En España.

Venderla.
Esta opción no tiene por qué ocurrir.
Pero los searchers compran para vender.

Quizás te enamoras de la empresa y quieres quedarte de gerente mil años.
Allá tú.

Lo que es seguro es que, si la vendes, te pedirán que te quedes al frente unos años más.
Los marrones no se devoran solos.

Yo añadiría que te busques a alguien que ya haya hecho el ciclo completo.
Yo lo intenté, pero Marc Bartomeus y Sergio Borasino me mandaron a la playa de Almayate.
Que hay buenos mangos para comer.

Así que rellené como pude el syndicate pie.
O como se llame en español.
Imagino que sería mariscada.

Pero aquí hablamos del sector privado.
De gente que se sindica para invertir.
No para desangrar.

Hasta aquí la Jan session de hoy, hasta mañana.

Recuerda:

Te llevas 100.000 lerus si me presentas a un empresario zorro plateado que tenga un empresón:

• Ventas 6 kilos/año, euros directos al taco, dos kilos/año limpio de polvo y paja, desde hace tres años. Que la relación ventas - neto sea de un tercio.

• Que el dueño esté forrao a romper… recuerda, yo quiero ser ese también.

• Una empresa sin sucesores y dueño en jubilación.

• Que tenga muchos clientes, no quiero el clásico que depende de uno grande.

• Te llevas 100.000 lerus solo si compro esa empresa, si no, te mando un abrazo en video, te lo prometo. Porque puede, que al final no compre un empresón, nunca se sabe lo que puede pasar en la vida.

• Una empresita es lo mismo pero 10 veces más pequeña, si te quedas por aquí, te enseño a comprar o vender la tuya, y también a buscar el dinero, y a decidir abogados, y en fin a todo, pero quédate y pásale estos a inversores, por si se quieren enterar que esto es más rentable que las startups esas molonas con futbolines y gente dándolo todo de culo a culo.