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No es sexy
Recibir dinero de los demás
Recibir dinero de los demás
es de las peores cosas que te pueden pasar si eres una persona responsable.
Suena sexy eso de levantar pasta,
pero para mí, no lo es.
De hecho, constata dos hechos bastante graves:
Eres un incapaz por tu cuenta.
Tienes la necesidad de contarlo, como ese polvo que no esperas ni a terminar y ya lo estás contando hasta en LinkedIn.
Un fondo de búsqueda consiste en cinco fases:
Levantar la pasta.
Buscar la empresa.
Ejecutar la adquisición.
Gestionar la empresa.
Venderla bien vendida.
Eso es lo que me fascinó de este proyecto:
que me permitía un comienzo y un final,
nada eterno que te comprometa más que una hipoteca.
¿Te preguntarás qué gana aquí el tonto motivao?
Pues es bastante simple:
pasta.
Desde el principio.
Excepto en la fase 1,
ahí te tienes que meter a pulmón, fuerte.
Yo me metí,
yo sí, tú no, amiguete.
En la fase 2,
tienes 18 meses para buscar la empresa
que te ponga la poronga a palpitar como divorciado con latina.
En esta fase, tienes un sueldo de entre 60k y 90k,
depende de los huevazos morenos que le eches.
Yo me pedí 75k para los Reyes,
y me lo trajeron.
En la fase 3,
sigues cobrando tu sueldo pactado
y, encima,
si cierras la operación,
ganas el 8,33 % de la empresa que compréis.
Ojo:
si hay adquisición,
los inversores convierten su capital en 150 %.
El problema es que si falla la fase 3,
tienes que volver a la 2.
Hasta ahí funciona el continue.
Yo he fallado ya dos compras,
ahora mismo estoy entre la 2 y 3,
parece un bucle…
a ver si lo cierro con vuestra ayuda.
La fase 4 es larga de cojones,
y es la más difícil.
Te tienes que quedar al menos 5 años en el negocio,
gestionarlo como el vestuario del Madrid en sus buenos tiempos
y luego pasar a la última fase.
Y si te portas bien,
y tus socios te ratifican año a año como CEO,
te ganas un 2,08 % cada año durante los 4 primeros años.
Con lo cual, otro 8,33 % si no la cagas como jefe.
La fase 5…
aquí ya sí que te sientas en la mesita de los mayores.
Ahora tú eres el vendedor,
y puedes hacer lo que te dé la gana.
O no, quién sabe.
Depende de la cantidad de pasta que hayas hecho ganar a los inversores,
recibirás una comisión que puede ir desde el 0 % hasta el 8,33 % restante.
Es decir:
que puedes llegar a ser el accionista mayoritario de la empresa,
el CEO,
y encima sacar pasta cuando la vendas.
¿Qué podría salir mal?
Hasta mañana.
Recuerda:
Te llevas 100.000 lerus si me presentas a un empresario zorro plateado que tenga un empresón:
Ventas 6 kilos/año, euros directos al taco, dos kilos/año limpio de polvo y paja, desde hace tres años. Que la relación ventas - neto sea de un tercio.
Que el dueño esté forrao a romper… recuerda, yo quiero ser ese también.
Una empresa sin sucesores y dueño en jubilación.
Que tenga muchos clientes, no quiero el clásico que depende de uno grande.
Te llevas 100.000 lerus solo si compro esa empresa, si no, te mando un abrazo en video, te lo prometo. Porque puede, que al final no compre un empresón, nunca se sabe lo que puede pasar en la vida.
Una empresita es lo mismo pero 10 veces más pequeña, si te quedas por aquí, te enseño a comprar o vender la tuya, y también a buscar el dinero, y a decidir abogados, y en fin a todo, pero quédate y pásale estos a inversores, por si se quieren enterar que esto es más rentable que las startups esas molonas con futbolines y gente dándolo todo de culo a culo.