La hierba está muy alta

¿Y qué?

No han regado, la hierba está alta, hay baches y la abuela fuma.

Todas, absolutamente todas, son excusas.

Comprar una empresa es fácil.
Comprar una buena empresa, a buen precio, es mucho más difícil.

Todo lo que se cuenta aquí es cierto.
Y muchas más cosas que no cuento yo, pero otros sí.

Los asesores, en general, son deficientes.
Los dueños no están preparados para la venta.
Hay trilerismo con la contabilidad.
Hay zorros con el lomo plateado que se las saben todas.
Hay falta de ética.

El proceso es lento y caro.
Y como es lento, todavía más caro.

El capital es cobarde.
Los reportes de sector no son fiables.
Yo no sé hacer llamadas en frío.
Inserta aquí algo malo que conozcas, aka “tu excusa”

La realidad es que lo que nos cuentan de los negocios en redes sociales, newsletters u organismos oficiales… es como la lucha libre.
Pura coreografía para los ingenuos.

La realidad se parece mucho más al octógono de Ilia Topuria.
Ahí los guantazos vuelan de cuatro en cuatro.
Y a cabezazos.

Yo me los he llevado de todos los colores.
Yo sí, tú no, amiguete.

Si cualquier cosa te sirve de excusa, quizás tengas un problema de madurez.
Y te falta autocrítica.

Sin autocrítica no serás un buen líder.
Y peor aún: si la aplicas solo a tu organización y sueltas todo sin filtro, mejor no lideres.

Para mí sería muy fácil decir que estoy gordo porque:

  • Mis padres me dieron una mala educación alimenticia.

  • Hay anuncios de McDonald’s por todos lados.

  • La comida que engorda es la más barata.

  • Lo más sabroso es hipercalórico.

  • O porque comer es la única manera de gozar con los pantalones puestos.

A la hora de hacer cualquier cosa en la vida puedes elegir:
La osadía de la ignorancia o la humildad de saber que lo que sale bien nunca es fácil.

Mañana te lo cuento usando el efecto Dunning-Kruger.
Y cómo hay gente que se lo pasa por el forro construyendo “el puente de los cuñaos”.

Hasta mañana.

Recuerda:

Te llevas 100.000 lerus si me presentas a un empresario zorro plateado que tenga un empresón:

  • Ventas 6 kilos/año, euros directos al taco, dos kilos/año limpio de polvo y paja, desde hace tres años. Que la relación ventas - neto sea de un tercio.

  • Que el dueño esté forrao a romper… recuerda, yo quiero ser ese también.

  • Una empresa sin sucesores y dueño en jubilación.

  • Que tenga muchos clientes, no quiero el clásico que depende de uno grande.

  • Te llevas 100.000 lerus solo si compro esa empresa, si no, te mando un abrazo en video, te lo prometo. Porque puede, que al final no compre un empresón, nunca se sabe lo que puede pasar en la vida.

  • Una empresita es lo mismo pero 10 veces más pequeña, si te quedas por aquí, te enseño a comprar o vender la tuya, y también a buscar el dinero, y a decidir abogados, y en fin a todo, pero quédate y pásale estos a inversores, por si se quieren enterar que esto es más rentable que las startups esas molonas con futbolines y gente dándolo todo de culo a culo.