- El Contraemprendedor
- Posts
- ¿ETA... ras, ras, ras?
¿ETA... ras, ras, ras?
No, no hablo de Otegui y Amedo.
No, no hablo de Otegui y Amedo.
Hablo de alguien como tú:
que quiere emprender,
que está quemado del trabajo,
que es un autónomo que quiere escalar su negocio,
que te has hecho un POWER MBA y te has venido arriba.
Sí, tú puedes emprender comprando una empresa.
Practicar lo que en 1984 denominaron en Stanford como
“Entrepreneurship Through Acquisition”,
también conocido como ETA (sí, por razones obvias, esta será la última vez que lo llamemos así en España).
Jan Simon usó el término EA, Entrepreneurial Acquisitions.
El tipo vive en España y, me imagino, vio claro
que aquí ese nombre no iba a calar.
Sí, un pijorro de aquella época le dijo a su profe:
—Quiero ser artista.
Y el profe, que ya sabía que el 90 % de las startups molonas fracasan a los 3 años, le dijo:
—No, criaturita, tu profe y sus amiguetes te vamos a poner dinerito fresco, panoja, viruta,
para que busques a alguien que se vaya a jubilar
y le ofrezcas ser el hijo que nunca tuvo,
para que te deje su empresa a cambio de un bonito cheque-retiro para su jubilación.
¡COMBO BREAK!
El abuelo se carga de billetes.
Y tú encuentras un trabajo de CEO.
¿Qué más se puede pedir?
Pues que los inversores ganen dinero
y el banco cobre sus intereses.
¿Te parece poco, amiguete?
Pero claro:
ni tú eres un pijo,
ni tu profe da clases en California,
tampoco conoces a ningún empresario que se quiera jubilar,
ni idea de qué empresa deberías comprar.
Y mucho menos…
¿De dónde vas a sacar la mantecá, la morterá?
Si te cuesta llegar a fin de mes, tieso. Que eres un tieso.
Por suerte o por desgracia, te vas a tener que quedar por aquí para leerlo, escucharlo y verlo.
Día a día te voy a contar lo que llevo aprendido en estos 1541 días como "etarra" (mierda, había prometido que era la última vez, ¿verdad?).
Sigo completamente sorprendido con todas las cosas buenas (y malas) de esta modalidad de emprendimiento:
comprarte una empresa.
¿Flipas o no? Yo lo flipé.
Y no la compré,
porque me arruiné por culpa de una puta.
Yo sí. Tú no.
Pero esa es otra historia,
y te prometo que te la contaré.
Suscríbete. Reenvíala.
Porque aquí te voy a contar:
Cómo es el Santo Grial y cómo buscarlo.
Cagadas (evidentes) como emprendedor, tanto empezando desde cero como comprando empresas.
Cómo relacionarte con inversores, los señores con la panoja, moreno.
Toa la burocracia que hay en esta movida. Qué asco.
Te lo voy a contar todo, todito, todo, amiguete.
Y da igual quién seas:
comprador, vendedor o inversor.
Porque esta oportunidad es tan evidente que no te das cuenta
de que se viene la mayor transferencia de riqueza de la historia.
Pero si no te gusta el rock and roll,
te lo vas a perder, amiguete.
No es emprendimiento a través de adquisición.
Es un traspaso, pringao.
Mira que le gusta a la gente ponerle nombres nuevos a las cosas de toda la vida.
Recuerda:
Te llevas 100.000 lerus si me presentas a un empresario zorro plateado que tenga un empresón:
Ventas 6 kilos/año, euros directos al taco, dos kilos/año limpio de polvo y paja, desde hace tres años. Que la relación ventas - neto sea de un tercio.
Que el dueño esté forrao a romper… recuerda, yo quiero ser ese también.
Una empresa sin sucesores y dueño en jubilación.
Que tenga muchos clientes, no quiero el clásico que depende de uno grande.
Te llevas 100.000 lerus solo si compro esa empresa, si no, te mando un abrazo en video, te lo prometo. Porque puede, que al final no compre un empresón, nunca se sabe lo que puede pasar en la vida.
Una empresita es lo mismo pero 10 veces más pequeña, si te quedas por aquí, te enseño a comprar o vender la tuya, y también a buscar el dinero, y a decidir abogados, y en fin a todo, pero quédate y pásale estos a inversores, por si se quieren enterar que esto es más rentable que las startups esas molonas con futbolines y gente dándolo todo de culo a culo.